Recientemente, el Grupo Quirón ha celebrado en Madrid un encuentro de actualización bajo el lema La evidencia en la reproducción asistida. En esta cita, coordinada por los doctores Miren Mandiola y Koldo Carbonero, de la Unidad de Reproducción Asistida Quirón San Sebastián, se ha puesto de manifiesto una vez más algo que los especialistas venimos afirmando desde hace algunos años y no es otra cosa que los hábitos de vida influyen decisivamente no sólo en la fertilidad, sino en las probabilidades de que una gestación finalice en el alumbramiento de un niño sano.
Una médico lucense tendrá a una niña, su tercer hijo, en un mes
Imagina que acudes a una clínica de fertilidad para lograr ser madre gracias al esperma de un donante y el director te dice algo así como “tranquila, la muestra es de un donante de confianza, le conozco bien”, tan bien que es él mismo.
Tener un hijo es un deseo grandilocuente, y es que la sensación de dar vida es, por lo general, conmovedora. No todo ser humano ha de sentir este afán por la paternidad, pero cierto es que tener descendencia es una idea anclada en el pensamiento de la mayoría de personas
Hace ya 17 años que un joven llamado Ismael revolucionaba la televisión en España ganando un concurso de desconocido formato llamado Gran hermano. La fórmula era sencilla: 10 personas que no se conocían debían convivir en una casa y nosotros como espectadores veíamos las 24 horas del día sus romances y discusiones. A aquellos concursantes que no nos gustaban los íbamos eliminando de la casa, y al final el último que quedaba, que era el mejor, se convertía en el ganador. Para los embriólogos, el time-lapse, es nuestro Gran hermano particular para llevar a cabo los tratamientos de reproducción asistida […]