En la UE se ha puesto en marcha un nuevo ensayo clínico que investiga el uso de células madre de tejido adiposo para tratar una enfermedad dolorosa y actualmente incurable
La fragmentación del ADN de los espermatozoides está en el origen de muchos casos de infertilidad masculina difíciles de diagnosticar. Estos defectos ocultos no aparecen en la espermiograma ni en la espermiocitograma, según un artículo publicado por el doctor Jan Tesarik, director del equipo de investigación de la Clínica MARGen de Granada (España), y la doctora Maribel Galán Lázaro, bióloga del equipo, en la revista Translational Andrology and Urology. “Normalmente –explica Tesarik- cuando los valores obtenidos en estas pruebas son anormales se recurre a una inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI) para fertilizar el ovocito, pero existen casos en los que […]
El espermiograma o seminograma es una de las pruebas de diagnóstico básicas en el estudio inicial de los problemas de fertilidad. Se trata de un estudio que se realiza a una muestra de semen con el fin de evaluar su calidad. Normalmente es la primera prueba diagnóstica en el varón de una pareja con problemas de esterilidad. Sirve para orientar a la pareja hacia un tratamiento de reproducción asistida u otro. Los responsables de llevar a cabo este estudio básico y analizar su interpretación son los técnicos de laboratorio y biólogos de la Unidad de Reproducción Asistida. Recogida e identificación de la muestra […]
La infertilidad en la mujer puede venir determinada por distintos factores y el primer paso para dar con el origen del problema es realizando una serie de pruebas de fertilidad. Los análisis hormonales son una de las pruebas fundamentales que permiten comprobar el funcionamiento del aparato reproductor femenino ya que cualquier desajuste hormonal puede indicar la existencia de alguna anormalidad que puede influir a la hora de concebir. Una de las hormonas investigadas en esta prueba es la prolactina.
“Pretendemos investigar dos nuevas formas de controlar los focos donde se produce la endometriosis. La novedad es que las moléculas a probar actuarían no sobre las células en sí, sino promoviendo la destrucción de las estructuras donde las células se asientan.