Entre las mujeres españolas mayores de 40 años se suele preferir la inyección de esperma intracitoplasmática (ICSI) y la donación de ovocitos
Es una técnica especial de inseminación de los ovocitos en los procedimientos de fecundación in vitro que consiste en la introducción de un sólo espermatozoide dentro del citoplasma del ovocito.
Estamos ante un tema peliagudo: la infertilidad (ya sea por nuestra parte o por la de nuestra pareja) nos hace pensar en muchas cosas más que otras parejas que no tienen ese problema para concebir. Las inevitables reuniones sociales a las que estamos invitados se llenan de personas de todas las edades: niños, jóvenes, adultos, personas mayores... y nos encontramos con algunos escenarios, entre otros, que están embarazados, han tenido hijos o no sabemos si han pasado por lo que estamos pasando nosotros.
Una vez sometidos a la primer batería de exámenes y no se encontró ningún problema o irregularidad, y dependiendo de lo que el especialista aconseje, existe la opción de seguir con la segunda ronda de pruebas para identificar la causa de la infertilidad. Elegir si siguen con el proceso para obtener el diagnóstico depende de vosotros, de vuestro tiempo, del presupuesto y de la disposición emocional con la que se cuenta.
El centro de reproducción asistida Institut Marquès de Barcelona ha comenzado a prescribir clases de sexo y erotismo a algunas parejas que ansían tener hijos y se toman las relaciones sexuales como una tarea y, muchas veces, les genera ansiedad, lo que reduce las posibilidades del embarazo. Según ha explicado la directora del Institut Marquès, Isabel López-Teijón, “cuando el embarazo no llega, la pareja tiende a disminuir el deseo y la frecuencia de las relaciones sexuales, algo que resulta contraproducente”. “Los deseos de conseguir un embarazo a toda costa provocan que, a menudo, muchas parejas orienten sus relaciones sexuales exclusivamente […]