Nuevas incubadoras y técnicas más avanzadas en el campo de la andrología incrementan las tasas de embarazo
(infertilidad.org.es) La ley italiana de Fecundación Asistida es “incoherente” según el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo. El tribunal considera contradictorio que las leyes del país transalpino permitan el aborto por motivos terapéuticos y sin embargo no permitan la selección de embriones sanos.
Kerry Grens - A pesar de que se las considera "infértiles", algunas parejas que realizaron un tratamiento de fertilidad pueden, luego, tener hijos naturalmente.
La Inseminación Artificial y la Fecundación in Vitro (de ahora en adelante FIV) son dos de las técnicas de Reproducción Asistida más utilizadas para ayudar a mujeres y parejas con problemas de fertilidad a ser padres Con ambos tratamientos de fertilidad, las posibilidades de éxito de un embarazo pueden aumentar significativamente respecto a un embarazo natural. Aun así, existen algunas diferencias entre la Inseminación Artificial y la Fecundación in Vitro que debemos tener muy en cuenta, sobretodo antes de empezar cualquiera de estos tratamientos de fertilidad.
La implantación embrionaria se conoce como el proceso a través del cual el embrión se ancla en el endometrio, con la finalidad de formar la placenta. Se trata de un mecanismo que permite dar sustento, nutrición y protección al embrión durante la gestación. La implantación comienza al final de la primera semana después de la fecundación del óvulo por el espermatozoide y se extiende hasta el final de la segunda semana (14 días después de la fecundación).