“Me pongo en los zapatos de una familia que quieren tener hijos”
Han pasado más de dos años desde que el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) presentara en sociedad al primer niño nacido tras su fecundación en un Embryoscope, un incubador muy novedoso que, a diferencia de los que se utilizaban anteriormente, permitía obtener fotografías del embrión en sus primeros días (antes de ser implantado en el útero de la madre).
La fecundación consiste en la unión de un óvulo y un espermatozoide, ya sea en el tracto reproductor de la mujer o en el laboratorio de Fecundación in Vitro (FIV).
Como en el caso de las mujeres, cuya menopausia comienza de media a los 50 años de edad, los hombres también sufren su propia menopausia.
Las universidad Penn State College of Medicine ha llevado a cabo un estudio sobre el impacto de un baipás gástrico sobre la función reproductiva de la mujer concluyendo que, aunque la pérdida de peso no mejora la fertilidad de la mujer sí consigue que aumente el deseo sexual y por ello aumenta la posibilidad de quedarse embarazada.