La transferencia embrionaria ya se ha realizado, ¿Y ahora qué?
Aunque el embarazo sea muy deseado y transcurra con normalidad, es inevitable temer que algo no vaya bien. Comentar las preocupaciones con el médico o la matrona es la mejor manera de vencerlas.
El 6 de marzo de 2009 la presentadora Raquel Sánchez Silva acudió a la clínica IVI de Madrid en busca de respuestas sobre la reproducción asistida. No encontró lo que esperaba: el doctor Juancho García Velasco le dijo que a sus 37 años sus posibilidades de ser madre se reducían drásticamente. Aún así, decidió seguir aplazándolo. Cinco años después, el resultado de aquella primera consulta ha fructificado en dos partos: el de sus gemelos Mateo y Bruno y el de su tercer libro 'Tengo los óvulos contados', en el que ayuda a desmitificar estos procesos con un único fin: dotar de información a las pacientes para evitar el dolor de la desilusión ante la aplastante realidad.
Hace unos meses apareció en varios periódicos españoles una noticia titulada: “España no halla destino para 230.000 embriones congelados”.
Cuando estamos buscando el embarazo, le prestamos especial atención a todas las señales que nos envía nuestro cuerpo y queremos saber si son indicativas de que hemos logrado la gestación. Uno de los síntomas que muchas mujeres presentan en los días cercanos a la implantación del embrión en el endometrio son los pinchazos. ¿En qué consiste la implantación del óvulo? Cuando hablamos de la implantación del óvulo fecundado, en realidad nos referimos al proceso mediante el cual el embrión se implanta o se adhiere en el endometrio, la capa de células que recubre el interior de la cavidad uterina. Es un […]