El 6 de marzo de 2009 la presentadora Raquel Sánchez Silva acudió a la clínica IVI de Madrid en busca de respuestas sobre la reproducción asistida. No encontró lo que esperaba: el doctor Juancho García Velasco le dijo que a sus 37 años sus posibilidades de ser madre se reducían drásticamente. Aún así, decidió seguir aplazándolo. Cinco años después, el resultado de aquella primera consulta ha fructificado en dos partos: el de sus gemelos Mateo y Bruno y el de su tercer libro 'Tengo los óvulos contados', en el que ayuda a desmitificar estos procesos con un único fin: dotar de información a las pacientes para evitar el dolor de la desilusión ante la aplastante realidad.
La pareja que lleva 12 años de convivencia y que se unieron en matrimonio el pasado 20 de octubre, han tomado la decisión de formar su familia a través de la maternidad subrogada en la India, país que tiene regulado el alquiler de vientre por el propio Estado.
Javier pide 200.000 euros a Sanidad de Madrid por perder su semen congelado
El hecho de no tener hijos supondría un impacto emocional importante para el 69 por ciento de las mujeres y para el 60 por ciento de los hombres, un porcentaje que sube hasta el 71 por ciento para población de entre 30 y 39 años, según una encuesta realizada por la Clínica Eugin.
Uno de los tratamientos que podemos encontrar en una clínica de fertilidad es la inducción a la ovulación y las relaciones sexuales programadas, o también denominado “coito programado”. Esta técnica gestiona y controla minuciosamente la maduración de uno o más ovocitos para saber el momento exacto de su ovulación. De este modo, se pueden programar relaciones sexuales entre los miembros de la pareja coincidiendo con el momento más fértil de la mujer. Pero… ¿en qué consiste el procedimiento? ¿es igual para todas las parejas? ¿para quiénes está indicado este tratamiento? Veamos las respuestas a estas preguntas frecuentes sobre inducción a la ovulación. ¿Para qué tipo de […]