En el grupo de apoyo que celebramos en Madrid cada mes y al que estás invitada, hay historias de todo tipo y una de ellas os va a animar a todas las que dudáis de la posibilidades de un embrión C, para más inri, si el embrión C está vitrificado. La hija de Patricia nació hace unos meses y en el último grupo al que acudió no pude resistirme a pedirla su testimonio.
Mujeres a las que llamarán en julio de 2016 tienen iniciadas las pruebas desde enero de 2014
La fecundación in vitro (FIV) basa su eficacia en la extracción de los óvulos de la mujer para inseminarlos en el laboratorio con los espermatozoides sanos del hombre. De esta técnica, resulta uno o varios embriones que se transfiere de nuevo al útero.
Un 15% de los casos de infertilidad es de origen desconocido. Así, los especialistas en reproducción asistida aplican a estos pacientes las técnicas conocidas sin saber muy cuáles y por qué van a funcionar. Ahora, un trabajo publicado en 'Human Reproduction' revela que un semen con calidad normal puede ser incapaz de fecundar al óvulo, al presentar una huella génica determinada, identificada por los especialistas del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) y de la Fundació Puigvert.
La congelación de esperma o criopreservación del semen es el proceso mediante el cual hoy en día es posible preservar la fertilidad masculina, congelando y manteniendo una o varias muestras seminales para su uso en un futuro posterior. La congelación del esperma tiene lugar a temperturas de -196º en vapores de nitrógeno líquido y a continuación es almacenada en un banco de semen, perfectamente identificada para su posterior utilización en tratamientos de reproducción asistida.