La experiencia de nuestra usuaria del foro blanch27 es sorprendente porque es muy joven para estar pasando por este difícil camino, el de las personas con problemas para concebir de forma natural. Acaba de cumplir 28 y el pasado año le diagnosticaron menopausia precoz. Actualmente está sometida a un tratamiento de ovodonación.
Estamos ante un tema peliagudo: la infertilidad (ya sea por nuestra parte o por la de nuestra pareja) nos hace pensar en muchas cosas más que otras parejas que no tienen ese problema para concebir. Las inevitables reuniones sociales a las que estamos invitados se llenan de personas de todas las edades: niños, jóvenes, adultos, personas mayores... y nos encontramos con algunos escenarios, entre otros, que están embarazados, han tenido hijos o no sabemos si han pasado por lo que estamos pasando nosotros.
Cada vez es más posible conservar la fertilidad de una mujer congelando durante años tejido de sus ovarios e implantándolo después para lograr un embarazo.
La esterilidad se define como la incapacidad para concebir tras un año de exposición al embarazo con un número adecuado de relaciones sexuales (2-3 cada semana) sin protección anticonceptiva adicional. En mujeres > 35 años y, especialmente, en las >38 años disminuyen, no sólo, las posibilidades de concebir de forma natural, sino también con técnicas de reproducción asistida. En condiciones normales, la especie humana tiene alrededor de un 20% de posibilidades de conseguir un embarazo cada mes, con lo cual, al cabo de un año de búsqueda, el 84% de parejas quedan gestantes y a los 2 años el 92%. […]
Aunque cada vez hay más mujeres que deciden ser madres alrededor de los 40 años, los expertos advierten de que, a partir de los 42 años, la tasa de éxito de un tratamiento de fertilidad, se reduce a menos del 5 por ciento