Mona se casó a los 15 años con Zeyad, después de nueve años de matrimonio han necesitado fecundación in vitro para ser padres. En el quinto mes de embarazo algo se complicó y fue trasladada al hospital de Najah en Nablus. Ahora están felices por tener a sus cuatro niños y una niña en casa aunque teme no poder hacer frente a los gastos de manutención. "Necesitamos más leche, pañales, vacunas y medicamentos, esperamos que las organizaciones sociales nos ayuden a aliviar esta carga", dice el padre.
Esta pareja presentaba un estudio básico de reproducción en que no aparecían causas graves que dificultaran la posibilidad de conseguir un embarazo.
Las Aulas de la Salud de El Norte de Castilla abren hoy un espacio para la prevención del cáncer ginecológico y los problemas de esterilidad.
«Haz lo que tú sientas que quieras hacer», defiende en su nuevo libro la periodista María Fernández-Miranda
En julio, Santiago iniciará una huelga de hambre para evitar que se lleven a su hija a Panamá