Los espermatozoides tienen un solo objetivo: encontrar el óvulo. Y para conseguirlo son capaces de superar cualquier obstáculo. Incluso pueden llegar a realizar cálculos elaborados, según ha demostrado un estudio reciente de un equipo científico internacional, liderado por el español Luis Álvarez y ligado al instituto alemán Max Planck.
Los últimos datos apuntan a que uno de cada cuatro tratamientos de reproducción asistida en España se realiza en mujeres sin pareja.
La reproducción asistida no pone límites a quien desee ser madre o padre y da la oportunidad de que se creen familias de todo tipo
Los tratamientos de reproducción asistida (T.R.A.) son en general procedimientos de bajo riesgo. Algunas de las complicaciones pueden ser controlables si se modula la intensidad de la estimulación ovárica efectuada o si se reduce el número de embriones a transferir (en una FIV). Otras, como el embarazo ectópico y el aborto, dependen de factores muy poco controlables.
Un pequeño estudio realizado en Bélgica comprobó que la donación de óvulos no daña la fertilidad femenina algunos años más tarde. "Es una práctica que se le ofrece en Bélgica a las pacientes desde los años 80. Los buenos resultados no nos sorprendieron", indicó el doctor Dominic Stoop, director médico del Centro de Medicina Reproductiva de Bruselas, en Bélgica, y autor principal del estudio.