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Tu también tendrás un feliz día del padre



Actualmente se conocen más casos de muchas parejas que desean ser padres, vivir esa experiencia de la vida que ha transcurrido por siglos, de traer a este mundo y criar un bebé con rasgos y características propias de los progenitores, pero para todos no se da de la misma manera o no al menos de la forma tradicional. Las razones son diversas desde infertilidad en las parejas, algún otro problema de salud, o en los casos de parejas homosexuales que anhelan dar lo mejor de sí y tener su propio descendiente. Para estos casos extremos el soñar no se hace imposible porque han surgido métodos que logran el proceso a través de la reproducción asistida trayendo esperanza para los futuros padres.
 
El ser padre por primera vez se representa como una figura o símbolo de guía, amor y respeto familiar, como influencia positiva en la vida de los hijos. Teniendo presente que en la realidad surgen todos esos sentimientos que un ser humano pudiera tener, desde la alegría infinita esa que no cabe en el pecho cuando te dicen que serás padre después de tantos intentos y por fin se desarrollará esa criatura que con mucha esperanza esperas, hasta el miedo que te puede paralizar la respiración cuando piensas que será de ti de quien dependerá, serás su imagen de fortaleza y te llega esa idea ¿y si no lo logro?. Pues no ha sido fácil desde tomar la decisión de traer un bebé que no sea de la forma tradicional hasta pasar por los pasos del método elegido como si se estuviera en cirugía, son momentos difíciles y más si el hombre es callado, que asume en su silencio toda responsabilidad de lo bueno o lo malo del proceso que se decidió seguir en pareja.
 
Cada hombre tiene su propia experiencia y sentimientos encontrados cuando han conseguido que el método fue positivo y serán padres, pero cada uno vive un silencio, una alegría, un miedo interno, pero esa sensación desaparecerá cuando tengas a tu bebé en brazos y notes esa sonrisita o te tome tu dedo con toda su manito, son momentos especiales que pocos viven, afortunados y optimistas es el camino a seguir después de tan maravillosa noticias.
 
Ser padre es una responsabilidad muy grande que solo se aprende siendo padre, es una verdad que las destrezas y aptitudes para criar a los hijos se adquieren solo en el trabajo constante y duro, agotador, pero al finalizar el día siempre nos aguardará una recompensa al observar la alegría y tranquilidad de los hijos. Aunque esta sea una gran verdad, no está de más prepararse con ciertas ideas y reflexiones para que logremos ser el mejor padre de todos. Prepararnos para esa etapa de nuestras vidas en la cual una parte de nosotros tomará vida propia y caminará por el mundo de la mano de nuestro amor y enseñanzas.
 
Los hijos deben tener en sus padres la personificación de aquel ser que respetan y a la vez tienen la mayor confianza. No el ogro al que ocultan cualquier novedad y al que temen y obedecen solo para no ser castigados. Muchas veces la relación con los hijos tironea de un extremo a otro, pero la sabiduría está en no desfallecer y encontrar el justo medio.
 
Otro buen consejo para convertirnos en el padre ideal es pensar en nuestra propia vida y en la relación que tuvimos con nuestros padres. En ese balance de contraponer los buenos y los malos episodios nos servirá de guía para no cometer los mismos errores con nuestros hijos. De eso se trata la vida: de aprender de las experiencias y de no repetir las malas prácticas. Legar a nuestra descendencia solo las cosas buenas del ayer es la mejor herencia que siempre agradecerá la humanidad.

Lainfertilidad.com