Sara, respecto al bulto de leche, si lo más que puede pasar es que se infecte, y se soluciona con antibióticos, que es lo que me parece entender, no has de preocuparte.

Mira, a mí también me descubrieron un fibroma al poco de tener a los niños, aunque dicen que igual ya lo tenía de antes, es que yo nunca me había hecho mamografía. El caso es que al hacer mamografía y ecografía ellos ven rápido si es benigno. Vamos, que si te dicen que vuelvas a los seis meses es que no ven el menor atisbo de malignidad: ante la más mínima duda te aconsejarían que lo extirparas. Así que, de momento, no hay que preocuparse. ¿Por qué te mandan que vuelvas a los seis meses? Para ver si ha evolucionado o no. Si es que no, pues nada de qué preocuparse. En mi caso, a los seis meses vieron que se había puesto activo y me aconsejaron que lo extirpara. Aún así me aseguraron que no me preocupara en absoluto porque era benigno. Esto me lo dijo tanto el ecógrafo como el ginecólogo. Me aconsejaron la extirpación porque al estar activo, era una forma de prevenir posibles problemas en el futuro. Pues bien, me lo extirpé y lo que ya me habían asegurado: al analizarlo era benigno del todo.

Otra cosa que me dijo el ecógrafo ya antes de mirar cómo había evolucionado: no tienes de qué preocuparte, pero si aún así eres del tipo de persona que se pone muy nerviosa, extírpalo y a otra cosa.

Así que después de mi experiencia te diría que no te preocupes porque repito: si ellos vieran el menor indicio de que puede ser peligroso, ya te habrían aconsejado la extirpación; nada de esperar seis meses, y parece ser que es bastante fácil, por la forma que tienen, saber si estos bultos son malignos o no revisten gravedad ninguna. Ahora, si estás inquieta mi consejo sería que te lo quitaras de encima.

Parece ser que este tipo de cosas pueden ocurrir tras un embarazo, debido a los cambios hormonales.