Ahora que tengo un poco de tiempo…..

Hola chicas, aprovecho que Daniel está dormido para contaros cómo fue mi parto. Ingresé en día 10 de febrero ya que tenía una cesárea programada para el día 11, tenía contracciones pero yo no notaba nada. Esa noche estuve bastante nerviosa pensando que al fin tendría a mi niño al día siguiente, casi no puede dormir.
Me pasé desde las 7 de la mañana esperando a que me llevaran a quirófano. Estaba realmente asustada, el tema cesárea me daba pánico pero  por otro lado sabía que prontito iba a verle la carita a mi hijo y sobre todo, saber que estaba bien.
Al fin me bajaron sobre las 11 y media. Ya conocía al gine que me iba a operar, un tío encantador y bueno qué decir del anestesista (qué bueno estaba el jodío ;D), simpatiquísimo. Me trataron con mucho cariño y yo me tranquilicé un montón. Me puso la epidural y el mismo anestesista me iba contando todo lo que le gine me iba haciendo. La verdad que durante toda la operación estuve muy tranquila, no se nota nada. Al final, serían sobre las doce y diez, escuché al gine que decía, “tu hijo se acaba de hacer pipí” y se reía. En ese momento el anestesista me dijo que mirara a la derecha que iba a ver pasar a mi niño. Iba con la matrona y otro médico. Bueno, no os puedo contar la sensación que me entró en ese momento cuando lo ví. Rompí a llorar como una magdalena, ¡¡¡era mi hijo!!! y lo estaba viendo por primera vez. La matrona me decía que era muy guapo y que estaba perfectamente. Uff os lo cuento y se me saltan las lágrimas. Cuando lo limpiaron un poco me lo acercaron pero se lo llevaron en seguida para lavar y pesar y corriendo para la incubadora para que estuviera calentito mientras me terminaban la cesárea.
Después de eso me acuerdo de poco, me sedaron para terminar pero desperté justo cuando terminaron.
Al salir del quirófano estaban mi marido, mi madre y mi hermana. Bueno mi marido super emocionado diciéndome que ya lo había visto y que era precioso, el pobre también había llorado cuando lo vió y qué más os puedo contar.
No puedo ser más feliz, mi niño es muy bueno, come muchísimo, y no os lo voy a negar, es cansado pero es lo más bonito que le puede pasar a alguien.
Chicas, ahora tengo una sensación extraña, por un lado, de felicidad y por otro, aunque nunca pensé que fuera a decir esto, de penita por no tener ya mi barriguita.
Disfrutad mucho de vuestro embarazo, yo no lo hice y ahora sé lo que me perdí.
besos a todas