Buenos días,
Es la primera vez que escribo en un foro, pero vuestras historias me han ayudado tanto que me siento en deuda.
Tengo 35 años y empecé a intentar quedarme embarazada hace 2 años y 2 meses. Tras un año de intento acudí al médico(Seguridad Social) y lo siguiente es lo que ya sabéis, una sucesión de pruebas desagradables. En Octubre del año pasado por fin llegó el resultado: Baja reserva ovárica. La doctora me dijo que “para que lo entendiera, mis ovarios tenían unos 39 o 40 años, y se avecinaba una menopausia prematura, que me daba el informe por si quería irme a una clínica privada porque en la Seguridad social tenía unos 2 años de lista de espera, y en mi caso el tiempo apremiaba y de manera natural era bastante improbable que me quedara embarazada”. Me cayó un jarro de agua fría, pero inmediatamente me puse manos a la obra y pedí cita en la privada. Allí me tuve que repetir analíticas y el resultado era el mismo, tenía una anti-mulleriana de 0,77 y el médico me repitió lo mismo, y que hasta por fecundación in vitro estaría complicado.
No obstante yo me lancé a intentarlo cuanto antes mejor y empecé con el tratamiento de estimulación ovárica, con ese proceso sufrí bastante tanto física como psicológicante, en Diciembre me hicieron la punción (conseguimos 9 óvulos, de los cuales sólo evolucionaron bien 4) y tres días más tarde me transfirieron 2 embriones de calidad A.
Notaba dolores de riñones y ovarios y 10 días después de la transferencia empecé a manchar un poco, me hice la beta 12 días después de la transferencia y me salió un positivo bajísimo( 13’9), así que me pidieron que 5 días más tarde volviera para repetirla( normalmente se repite a los dos días y si la beta se duplica es que el embarazo avanza, pero a mí se me atravesó Nochevieja, etc., así que tuve que esperar 5 días de agonía haciendo reposo). Cuando me la repetí la beta ya salió negativa, por tanto se deducía que los embriones habían llegado a agarrar pero después tuve un microaborto. El médico me dijo que al menos teníamos buen pronóstico, porque mi útero había hecho el intento de retener a los embriones y llegó a haber embarazo, yo me reí irónicamente y le dije que “vaya buen pronóstico”… El pobre hombre tenía que decir algo para consolarme. Me dijo que sólo teníamos que esperar un mes(una regla), y a partir de ahí podíamos intentarlo cuando estuviéramos preparados emocionalmente.
Yo no estaba preparada, mi cuerpo y mi cabeza habían sufrido mucho, me había aislado de mi vida social por completo durante dos meses y ahora necesitaba respirar. Y lo peor, tenía mucho miedo de que volviera a fracasar, el sentido de mi vida desde que tengo prácticamente uso de razón ha sido la maternidad, y ahora lo veía tambalearse.
Estaba llevando desde el principio todo este proceso en silencio porque me agobiaba y me ponía muy nerviosa que me preguntaran constantemente y que se compadecieran de mí, sólo se lo dije a mi familia y la de mi marido antes de hacerme la FIV y rogué que me preguntaran lo menos posible por todo, ya que esa era la mejor manera que encontré de sobrellevarlo. En vez de aliviarme hablar del tema, me hacía daño. En el trabajo andaba a base de mentiras , con excusas de otras citas médicas, etc, cosa que también me dolía porque mi jefe es una muy buena persona, pero no podía explicárselo.
Por una serie de razones me decidí a volver a intentarlo en marzo, ahora era tratamiento era más ligero porque me transfería los dos embriones congelados de calidad B.
Me dolían los riñones y ovarios, pero no tan fuerte como la otra vez, y 11 días después de la transferencia voví a manchar, era sábado de madrugada y pasé un domingo horrible porque de inmediato lo dí todo por perdido, lloré y me cabreé aunque en el fondo, no se pierde la esperanza hasta que no lo ves claro…el lunes fui a hacerme la BETA, y para mi sorpresa tuve un valor de 803!!! (lo que tuve fu el sangrado de implantación).
Ya me han hecho ecografía y me han agarrado los dos embriones(cosa que mi marido y yo no olíamos por el valor tan alto de la beta), hasta les escuché el corazón a los dos!!! Llevo con pequeñas manchas todo este tiempo, pocas veces son rojas(que es lo preocupante), casi siempre marrones, así que tengo que hacer un reposo relativo… aún estoy asustada y me cuesta creérmelo, pero estoy muy contenta y a pesar de estar mal con náuseas y el manchado lo llevo con mucha ilusión, así que ojalá sigan mis dos pequeños adelante.
Pues nada, os dejo esta larga historia aquí porque sé de sobra que los finales felices ayudan muchísimo en nuestros casos!! Saludos.