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Científicos de EE UU modifican genéticamete embriones humanos



Investigadores de Estados Unidos han dado un salto cualitativo en el campo de la genética al editar embriones humanos gracias a la técnica CRISPR, la cual permite eliminar de forma selectiva aquellas secuencias de ADN no deseadas del genoma. Se logra a través del uso de la proteína nucleasa, que corta los fragmentos desechables. El avance, adelantado por la revista ‘Technology Review’ del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), fue logrado por el doctor Shoukhrat Mitalipov y su equipo de la Universidad de la Salud y Ciencias de Oregón. Es la primera vez que se utiliza esta técnica con éxito en los laboratorios norteamericanos, ya que hasta el momento solo lo habían conseguido en tres ocasiones científicos en China.

Sin embargo, la gran diferencia entre el hallazgo de Mitlipov y el de sus colegas asiáticos, según señala la revista, radica en el número de embriones usado y la demostración de que es posible corregir de manera segura y eficiente los genes defectuosos que causan enfermedades hereditarias. En los anteriores intentos, los investigadores chinos se toparon con el que CRISPR causaba errores de edición y que las modificaciones en el ADN no afectaba a todas las células del embrión sino solo en algunas. Es lo que se denomina mosaicismo y todo hace indicar -a falta de una publicación oficial las próximas semanas- que el equipo estadounidense había evitado este problema y los efectos ‘fuera de destino’ gracias a la inyección CRISPR en los embriones humanos al mismo tiempo que fueron fertilizados con los espermatozoides.

Ingienería

El objetivo de los científicos al alterar el código de ADN de estos embriones es demostrar que se pueden erradicar o modificar los genes que causan la enfermedad hereditaria. Este proceso se denomina ingeniería de la línea germinal, ya que cualquier niño modificado genéticamente pasaría los cambios a generaciones posteriores a través de sus propias células germinales -óvulo y esperma-.

No obstante tanto la técnica como el proceso están siendo cuestionados por críticos que ven más cerca que se puedan crear bebés diseñados genéticamente a la carta. El CRISPR, por ejemplo, fue declarado por la comunidad científica como el descubrimiento del año en 2015; para los servicios de Inteligencia de Estados Unidos, suponen una potencial «arma de destrucción masiva» que hay que vigilar.