Quería compartir mi experiencia con vosotras, porque estas cosas muchas veces nos animan.

Después de dos años buscando, iniciamos esta andadura por las clínicas de fertilidad. Nos hicimos una inseminación, pero por nuestra edad 35 años y viendo que llevábamos dos años buscando y nada, nos recomendaron ICSI. Yo tenía una trompa bien y la otra poco permeable, no estaba obstruída pero no se veía bien. Él unos 37 millones de espermatozoides, pero la mitad de ellos no valían.

Tuvimos suerte porque a la primera ICSI lo conseguimos y ahora tenemos una niña de 14 meses, preciosa, que voy a decir yo.

Pasado un año de su nacimiento, ya estaba convenciendo a mi marido de que teníamos que empezar otra vez, no nos habían quedado ningún congelado, así que empezar de cero. Desde luego deciros que desde el primer momento no tomé precauciones pues suponía que era imposible quedarnos de modo natural, así que imaginaros mi sorpresa cuando me enteré que estaba embarazada.

Con esto quiero animaros a todas. A mí me gustaba mucho leer historias así porque me daban mucho ánimo. Siempre nos lo dicen y es verdad, aunque no podamos evitarlo, mucho de lo que nos pasa es psicológico, muchísimo y estoy convencida de ello y creo que con el segundo nos relajamos un poco más, porque nuestro sueño ya se ve cumplido con el primero y entre eso y que el cuerpo ya está más predispuesto, creo que por eso es más fácil conseguirlo de modo natural.

Espero que con mi historia pueda ayudaros a alguna a animaros.