Skip to content

Condenan una empresa por engañar parejas que contrataron vientres de alquiler



Un juez de Barcelona ha condenado a la empresa Subrogalia a indemnizar con 88.408 euros en total a dos parejas que la contrataron para tener hijos con un “vientre de alquiler” en el extranjero, por incumplimiento grave de sus compromisos.

En su sentencia, el juzgado de Barcelona estima la demanda presentada por ambas parejas, representadas ante los tribunales por el bufete Marín Fonseca, y declara resueltos los contratos que Subrogalia firmó con ellas, a las que deberá indemnizar también por los daños y perjuicios causados.

La sentencia de Barcelona es la primera que resuelve las acciones legales que varias parejas españolas han iniciado contra Subrogalia, por considerar que la empresa les ha engañado, ya que les exigía más dinero del pactado para seguir adelante con los trámites de la gestación subrogada.

La sentencia condena a la empresa a pagar 36.167 euros a una de las parejas y otras 52.241 a la otra, más los intereses legales correspondientes, al reconocer que incumplieron con sus compromisos de “adoptar todos los medios necesarios” para conseguir el nacimiento de al menos un hijo por gestación subrogada, así como llevar a cabo los trámites necesarios para la entrada del bebé en España.

El juez reconoce que el asesoramiento jurídico que Subrogalia ofrecía por contrato era insuficiente e incorrecto y que ni siquiera se ha podido acreditar que tuviera contratados abogados para encargarse de los trámites legales para la gestación subrogada.

La sentencia admite también que la empresa incumplió con su obligación de llevar a cabo las transferencias embrionarias comprometidas y no ha podido acreditar que fueran necesarios los viajes que las parejas demandantes llevaron a cabo México, donde supuestamente se debía llevar a cabo la gestación subrogada.

Además, según el juez, la clínica Iegra de Barcelona, donde debían fecundar los embriones e implantarse los “vientres de alquiler”, no tenía permisos para esa actividad.