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Cómo tratar el Síndrome de ovarios poliquísticos (SOP) y la infertilidad



Lo primero que se recomienda es un cambio del estilo de vida en el caso de mujeres afectadas por SOP con problemas de sobrepeso: la dieta y el ejercicio pueden ayudar, junto con otras intervenciones conductuales, a que nuestro cuerpo consiga fomentar la fertilidad simplemente creando unos hábitos sanos. Por otra parte, la primera terapia médica para la inducción a la ovulación para mejorar la fertilidad es el citrato de clomifeno, mientras que las gonadotrofinas, laparoscopias y posibles dosis de metformina son tratamientos de segunda línea que se deberían aplicar en mujeres que presenten dificultades con el citrato de clomifeno. Además, existen los inhibidores de aromatasa, pero no existe la suficiente evidencia para recomendar inhibidores de aromatasa en vez de los de citrato de clomifeno en general o específicamente en casos concretos. FIV e ICSI son tratamientos de tercera línea, esto es, que se recomiendan una vez probada la ineficacia de los tratamientos de primera y segunda línea, o en presencia de otros factores de infertilidad.

SOP es la enfermedad endocrina más común en mujeres en edad fértil y afecta a entre un 4% y un 12% de la población general, siendo además la causa más común de infertilidad. Podría darse un diagnóstico de SOP cuando se presenta oligo-ovulación o anovulación, hiperandrogenismo clínico o bioquímico y ovarios poliquísticos.

Este artículo pretende arrojar un poco de luz en la actualidad del tratamiento de la infertilidad cuando se presenta Síndrome de ovarios poliquísticos y está basado en Evidence based guideline for the assessment and diagnosis of PCOS, una guía publicada recientemente por la PCOS Australian Alliance para valorar y diagnosticar SOP.

Mejora del estilo de vida

Las intervenciones en el estilo de vida, incluyendo dietas, ejercicio o una combinación de estas, son consideradas como tratamiento de primera línea para combatirlo en casos de mujeres con problemas de sobrepeso y que puedan mejorar su ovulación y fecundidad, según los resultados del trabajo de investigación del equipo australiano. En estas mujeres, la evidencia existente no permite sostener aún que empezar un tratamiento con medicamentos para la ovulación inducida como el citrato de clomifeno o la metformina en vez de un tratamiento del estilo de vida sin medicamentos vaya a ser más efectivo que empezar a tratar el estilo de vida en combinación con estos medicamentos.

Tratamientos farmacéuticos de inducción a la ovulación

Citrato de clomifeno
El citrato de clomifeno, un modulador selectivo de los receptores estrogénicos, ha sido utilizado como agente médico de primera línea para la ovulación inducida desde 1967. Se administra durante 5 días entre los días 2 y 5 de cualquier ciclo menstrual, empezando con bajas dosis e incrementándola en los casos de anovulación.

Los estudios con citrato de clomifeno han mostrado un ratio de ovulación de entre el 60% y el 85% y un ratio de embarazo de entre el 30% y el 50% tras seis ciclos ovulatorios, con un riesgo creciente de embarazo múltiple (entre el 5% y el 7%), según datos del australiano Centre for Clinical Effectiveness, de Southern Health Melbourne.

Metformina
La metformina es un fármaco sensibilizador a la insulina que fue introducido en tratamientos en 1994. Existen estudios que demuestran que este fármaco mejora el ratio de ovulación y el de embarazo clínico, pero no el de nacimientos vivos por mujer.

La adición de metformina al citrato de clomifeno es beneficiosa para mejorar los ratios de ovulación, embarazo y nacimientos vivos en los casos de mujeres que presenten resistencia al citrato de clomifeno por sí solo.

Gonadotrofinas
La ovulación inducida con gonadotrofinas empezó en los años 60 y hubo bastante apoyo divulgativo sobre su uso en casos de mujeres con SOP y que presentaran dificultades con el citrato de clomifeno. Comparando con la laparoscopia, no existe diferencia en los ratios de nacimientos vivos, embarazo en curso, ovulación o aborto, pero sí que se observa un mayor ratio de embarazo múltiple.

Inhibidores de aromatasa
Los inhibidores de aromatasa, incluyendo letrozol y anastrozol, fueron propuestos inicialmente como fármacos inductores a la ovulación en mujeres que presentaban anovulación en 2001. Existe una constante preocupación por el potencial efecto cancerígeno del letrozol en tratamientos contra la infertilidad, pero ya hay estudios que no encontraron un incremento del riesgo de anomalías fetales.

Los estudios con estos inhibidores no presentan datos que revelen un mayor éxito, por lo que no hay una evidencia demostrable que haga recomendar esta opción sobre el citrato de clomifeno en mujeres anovulatorias que presenten infertilidad.

Tratamientos quirúrgicos

Laparoscpia
La cirugía ovárica laparoscópica, descrita por primera vez por Gjonnaess en mujeres que con SOP en 1984, es una terapia de segunda línea para mujeres que presenten resistencia al citrato de clomifeno, lo que es igual de efectivo a entre tres y seis ciclos de ovulación inducida mediante gonadotrofinas en términos de resultados pero con un menor riesgo de embarazo múltiple y menos costes directos.

Cirugía bariátrica
El estudio australiano al que hace referencia este artículo no encontró evidencias demostrables sobre estos procedimientos (que buscan la disminución de peso corporal) en SOP. No obstante, en ausencia de evidencias, se reportó una recomendación clínica consensuada que consiste en que la cirugía bariátrica podría ser considerada terapia de segunda línea para mejorar la fertilidad en mujeres adultas con SOP y que presenten anovulación, mujeres con índice de masa corporal (IMC) mayor a 35 kg/m2 y que continúen presentando infertilidad a pesar de haber sido sometidas a programas intensivamente dirigidos a controlar el estilo de vida, incluyendo aquí la reducción de la ingesta calórica, el ejercicio y las intervenciones conductuales y/o farmacológicas por un mínimo de 6 meses.

FIV/ICSI
Los tratamientos de Fecundación in vitro e ICSI no están indicados para las mujeres con SOP que presenten anovulación de por sí, sino que están recomendados bien como un tratamiento de tercera línea (tras haber fallado las de primera y segunda línea, como pueden ser el citrato de clomifeno, las gonadotrofinas o la laparoscopia) o en la presencia de otros factores de infertilidad como puede ser el daño tubárico, endometriosis severa o un factor de infertilidad masculina. Las mujeres con SOP que se someten a tratamientos de FIV tienen los mismos ratios de embarazo, aborto y nacimientos vivos que aquellas pacientes sometidas a FIV sin presentar SOP, según demuestran en el estudio 9 análisis de observación en los que se tomó como muestra en total a 458 mujeres con SOP.


Fuente:

ORGYN: The treatment of infertility in polycystic ovary syndrome: a brief update