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Infértil, aunque con buen semen



Un 15% de los casos de infertilidad es de origen desconocido. Así, los especialistas en reproducción asistida aplican a estos pacientes las técnicas conocidas sin saber muy cuáles y por qué van a funcionar. Ahora, un trabajo publicado en ‘Human Reproduction’ revela que un semen con calidad normal puede ser incapaz de fecundar al óvulo, al presentar una huella génica determinada, identificada por los especialistas del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) y de la Fundació Puigvert.

El trabajo, coordinado por la investigadora del grupo de Genética Molecular Humana del IDIBELL Sara Larriba, y el médico del servicio de Andrología de la Fundació Puigvert, Lluís Bassas, no sólo abre la puerta para avanzar en el conocimiento de las causas de infertilidad de origen hasta ahora desconocido, sino también a desarrollar un test genético adicional (más allá del análisis clásico bajo el microscopio) para identificar individuos de fertilidad baja, a pesar de tener valores seminales normales.

Esto no sólo valdría para las parejas que buscan ayuda para tener hijos, sino también para mejorar las tasas de éxito con donantes de semen, a los que se podría realizar también la prueba genética.

El trabajo comparó la eficiencia diagnóstica de fecundidad del esperma utilizando los dos parámetros de evaluación: el que se realiza habitualmente y el nuevo que mide el patrón de expresión del ácido ribonucleico (ARN).

El esperma analizado procedía de muestras de 68 donantes solteros, jóvenes y sanos, de los que a priori no se conocía su fecundidad real.

Los investigadores analizaron el perfil de expresión de 85 genes en el semen de donantes con diferentes tasas de embarazo producto de inseminaciones intrauterinas. La selección de estos 85 genes se realizó a partir de una huella de ARN de hombres fértiles normales ya establecida en investigaciones anteriores. A partir de este análisis, se encontraron diferencias significativas en la expresión de ocho genes individuales entre las muestras con peores y mejores tasas de embarazo.

Partiendo de esta base, se halló que combinando los resultados de la expresión de cuatro de estos genes se obtenía una sensibilidad mucho mayor que con el análisis clásico de semen (82% frente a 23%) para reconocer a los individuos subfértiles. El modelo fue validado en una muestra independiente de donantes.