Skip to content

Una mujer de 91 años podría haber llevado un feto momificado durante 50 años en su interior



Médicos del Hospital Claudio Vicuña de San Antonio, en Chile, encontraron un feto desarrollado y momificado en el vientre de una mujer de 91 años que acudió al centro asistencial tras sufrir una caída.

Después de ser sometida a unas radiografías para verificar si tenía alguna lesión, los médicos comprobaron que la anciana chilena tenía un feto que podía llevar más de 50 años en su interior. Se trata de un “suceso extraordinariamente poco frecuente”, explicó el ginecólogo y director del centro hospitalario, Marco Vargas Lazo. Según el representante del hospital, la radiografía mostró que la mujer tenía “un esqueleto de un feto grande y desarrollado que ocupaba toda su cavidad abdominal”.

Después de tantos años, “su cuerpo reabsorbió los tejidos del feto, que hoy forman parte de los órganos normales de la paciente en la cavidad abdominal”, explicó Vargas Lazo. Una de las razones que podría explicar un caso tan extraordinario es que se tratase de un embarazo abdominal, que el organismo de la mujer hubiera “encapsulado” para evitar que se produjera algún tipo de infección. No obstante, el ginecólogo aseguró que esta es solo una suposición pues por el momento, “el caso está fuera de cualquier explicación médica habitual”.

La lógica de la ginecología y obstetricia dice que un feto que se desarrolla dentro del útero en condiciones normales no puede quedarse allí 40 años, el cuerpo lo habría expulsado independientemente de que esté vivo o muerto”, sostuvo Vargas Lazo. De ahí que la hipótesis del equipo médico del hospital es que se tratase de un embarazo extrauterino, que se produce cuando el óvulo fertilizado se desarrolla en tejidos distintos a la pared uterina, ya sea en la trompa de Falopio, en el canal cervical o en la cavidad abdominal.

La mujer, que desconocía haber tenido el embarazo, reconoció que en algún momento “alguien le habría dicho que podría tener un tumor” y afirmó que durante este tiempo “había padecido dolores de barriga más o menos habituales pero se habría acostumbrado a vivir con ellos”, comentó el director del centro hospitalario. Para nosotros también es un poco extraño que ella no se diera cuenta antes y que, a pesar de pensar que tenía un tumor, no consultara ni viera a ningún especialista en tanto tiempo”, comentó. La anciana, que acudió al centro por motivos no relacionados con el feto, ya fue dada de alta y se encuentra actualmente en su domicilio en la municipalidad de Navidad, en la región de O’Higgins.